Terapia Canina

En la terapia asistida por animales, un terapeuta capacitado utiliza animales como parte de un plan de tratamiento. Por ejemplo, el terapeuta podría utilizar un perro de terapia para ayudar a un niño a aprender habilidades de comunicación. La terapia podría consistir en alentar al niño a hablar con el perro. La terapia asistida por animales puede ser utilizada por personas con una amplia gama de necesidades médicas, de desarrollo y emocionales, incluidos los niños autistas.

Los defensores de la terapia asistida por animales afirman que puede ayudar a los niños autistas a aprender empatía, comunicación y habilidades sociales. No hay evidencia de que la terapia asistida por animales pueda cambiar las características del autismo.

La terapia asistida por animales proviene de estudios sobre la interacción entre humanos y animales y el vínculo entre ellos. Este campo estudia la relación entre los animales y los seres humanos. La teoría es que los animales son una fuente de apoyo calmante y no crítico, y pueden ayudar en la comunicación y la interacción social. Algunos estudios de baja calidad han encontrado que los animales podrían ayudar a las personas autistas a desarrollar habilidades sensoriales, sociales y habilidades de comunicación temprana. Los animales también podrían ayudar a las personas a gestionar su comportamiento y estrés. Se necesita más investigación de alta calidad para determinar si la terapia asistida por animales es efectiva.

La terapia asistida por animales generalmente implica una serie de sesiones con un terapeuta y un animal. Los niños pueden realizar las sesiones en casa, en la escuela o en una clínica. Pueden hacer las sesiones en grupo o de manera individual.

La terapia asistida por animales generalmente involucra perros. Pero también puede involucrar caballos, cobayas, gatos, hurones, aves, animales de granja y animales de zoológico.

Dependiendo de las necesidades individuales de cada niño, la terapia generalmente involucra entre 6 y 12 sesiones.